Curso de Ciencia Espiritual 2

Cuando el espíritu creado usa sus atributos con sabiduría, entonces vibra de forma perfecta y existe de forma natural en la dimensión primaria, que corresponde a la dimensión de máxima armonía y por consiguiente donde existe de forma natural El Creador. Es un estado diríamos de “máxima felicidad”.

Pero si por alguna razón el espíritu en uso de su libertad actúa de tal forma que crea un desbalance entre sus atributos AMOR-INTELIGENCIA-LIBERTAD, entonces deja de vibra en perfecta armonía y empieza a vibrar de forma menos armónica o baja. Esto es lo que se llama un estado alterado, de equivocación o simplemente un estado de desarmonía.

Cuando esta alteración se presenta, el espíritu de forma natural deja de vibrar en la dimensión primaria y pasa a vibrar a una dimensión propia de su nuevo estado, “cae” a una dimensión llamada dimensión espiritual o dimensión 2.

No conocemos los detalles de cómo sucedió esto, solo sabemos por comunicación con espíritus de elevada armonía (espíritus con luz brillante) que una cantidad enorme de espíritus experimentaron una alteración de su armonía original. Este cambio debió ser inicialmente muy sutil pero suficiente para que dejaran de existir en la dimensión de creación y pasaran a hacerlo en la realidad o dimensión 2 que mencionamos antes.

Es importante aclarar que ni cuando los espíritus fueron creados ni cuando sucede este accidente de la desarmonía existía la materia, ni el universo ni nada físico. Todo era espiritual.

Es importante recalcar de nuevo que la caída de los espíritus desarmónicos a la dimensión espiritual sin embargo no debe entenderse como el resultado de una decisión o intención de El Creador de separarlos por su estado alterado. El paso de los espíritus desarmónicos a una dimensión vibracionalmente mas baja sucede como consecuencia natural de su accionar en libertad.

A partir de ese instante, los espíritus quedan divididos en dos grupos: los espíritus aún armónicos o puros y los espíritus desarmónicos o equivocados.

Lo más complejo de comprender de la desarmonía de los espíritus es que esto sucedió estando en un estado de total armonía. Sin embargo, no debe entenderse este evento como la súbita adquisición de un estado de maldad o bajeza, sino que debió suceder a través de una secuencia de eventos que poco a poco fueron degradando esa armonía hasta alcanzar los niveles de oscuridad o desarmonía que hoy podemos reconocer en algunos espíritus encarnados.

¿Cómo pudo suceder algo así? no lo sabemos pero podemos intentar entenderlo a través de este ejemplo hipotético de cómo en medio de la armonía pudo nacer un estado de desarmonía.

Imagine el lector un lugar único de existencia llamado la dimensión primaria. Es un lugar-espacio infinito en todas direcciones. Allí se puede apreciar en el horizonte un foco enorme de luz brillante pero suave que se expande generosamente. Es El Creador.

Imaginemos allí una cantidad casi incontable de espíritus que se extienden de forma casi interminable por ese espacio infinito, todos vibrando en un estado de armonía plena que claramente se refleja en un estado de total felicidad.

Esos espíritus son seres perfectamente armónicos que después de despertar a la conciencia completamente ignorantes de todo, rápidamente han ido aprendiendo cada vez más de su realidad, de ellos mismos y de su relación con la Inteligencia Suprema. Aunque todos los espíritus son iguales por creación, cada uno es distinto a otro como resultado de su individualidad, y cada uno va desarrollando interés por un tema distinto. Así, eventualmente los espíritus se van agrupando libremente y de forma temporal con otros que comparten sus mismos intereses. Son como grupos de estudio e investigación.

Esta es una de las grandes ventajas de la individualidad sumada a la armonía espiritual, pues en estos grupos inteligencias distintas logran sumarse para aprender cosas nuevas y entender mejor aquello que les interesa.

Aunque esto puede eventualmente conducir a que algunos aprendan cosas que los demás no, esto se ve compensado porque como expresión de su atributo amor, siempre comparten con los demás lo aprendido hasta que eventualmente todos tengan la nueva información. Es un proceso fascinante de evolución colectiva que los saca a todos de la ignorancia y eleva el colectivo en sabiduría.

Imaginemos ahora uno de estos grupos que dentro de sus especulaciones teóricas llega a la idea de la posible existencia de otras dimensiones. Es una idea interesante porque hasta entonces han existido en su dimensión de creación, porque allí fueron creados y allí despertaron a la conciencia de ser y existir.

Ampliando sus análisis, estos espíritus descubren que una dimensión esta definida por un rango vibracional, y que otras dimensiones pueden existir en otros rangos vibracionales diferentes. Por supuesto no saben ni logran intuir qué exactamente puede significar un rango vibracional mas bajo o qué efecto puede tener en un espíritu el vibrar de forma distinta.

Los espíritus especulan que esas otras dimensiones vibracionales no existen de forma real simplemente porque nada las ocupa, así que son hipotéticamente dimensiones virtuales, es decir, posible de existir pero inexistentes. Así que en su afán de comprender lo que son y como funcionan, deciden que es necesario que un espíritu de ellos llegue hasta una de ellas y regrese para compartir su conocimiento, así que planean un experimento.

Los espíritus saben que el estado vibracional del espíritu depende de la armonía de sus atributos, así que concluyen que si logran hacer que uno de ellos, un sujeto voluntario, experimente una leve alteración de su armonía, automáticamente lo pondrá en esa dimensión para su estudio.

Todo este plan nace en medio de una intención totalmente positiva. Saben que teóricamente el espíritu puede alterar su armonía, pero jamás lo han experimentado, ni saben o sospechan que esto puede traer consecuencias secundarias indeseadas. Su interés es puramente académico y sin mala intención.

Entonces se diseña el experimento. El espíritu voluntario será sometido a un estado de aislamiento por parte de los demás elementos del grupo. Acuerdan, por ejemplo, que será totalmente ignorado por los demás con la intención de alterar levemente su armonía para que pueda llegar a esa otra dimensión.

El experimento da comienzo. El espíritu aislado comienza a sentir la soledad del aislamiento, surge en el una sensación que jamás había sentido. Siente cierta soledad. Quisiera terminar con eso, pero sabe que es un experimento importante, así que continua. Eventualmente siente que algo en él esta cambiando, y los demás también lo perciben así.

La armonía del espíritu aislado comienza a decaer y con ello empieza a notar como su realidad se va desvaneciendo ante si. Casi sin darse cuenta deja de existir en la realidad propia de la dimensión primaria y pasa a existir a la realidad propia de la dimensión espiritual. El espíritu del experimento ha abandonado la realidad primaria y ahora existe en la realidad de la dimensión espiritual o 2.

Allí, todo es oscuridad y esta solo. Comienza a sentir el sufrimiento de la soledad y eso solo acrecienta su desarmonía. Eso le impide lograr la armonía necesaria para volver. Esta atrapado.

El éxito del experimento se expande como una mancha por una cantidad incalculable de espíritus. Están fascinados con el resultado y se adhieren, pero al mismo tiempo comienzan a experimentar las consecuencias de una acción que está generando un estado de sufrimiento a aquel que ya partió.

Con el dolor de aquel, todos ellos comienzan a experimentar una leve alteración de su propia armonía. Sutil, pero suficiente para que algunos más abandonen la dimensión primaria rumbo a la dimensión espiritual. Cada vez se suman más y más espíritus.

Otros espíritus que no estaban involucrados con esta idea comienzan a notar que algo no está bien y empiezan a buscar una respuesta. Eventualmente descubren que el experimento dio origen a una anomalía de consecuencias no previstas. Se dan a la tarea de dar a conocer al colectivo sus conclusiones y eventualmente la mancha de desarmonía se detiene, pero ya son muchos, muchísimos los que han caído a la dimensión espiritual.

La división se ha creado.

En este ejemplo se trata de incluir 2 elementos esenciales para comprender lo que fue la perdida de armonía de los espíritus:
1. Que todo comenzó en medio de una intención positiva.
2. Que a pesar de ser espíritus en un avance constante en sabiduría no pudieron llegar a entender las consecuencias potenciales de sus acciones, básicamente porque no sabían que era realmente la desarmonía ni que consecuencias podía causar.
De nuevo, es importante aclarar que esta es solo una idea hipotética que plantea como partiendo de una intención positiva se puede llegar a un resultado negativo. Como suelen ensenar los abuelos “el que inocentemente peca, inocentemente se condena”.